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foto: marco garro

The Guardian selecciona 10 historias de esclavitud moderna y una de ellas tenía que estar en el Perú

Joven peruano cuenta cómo se convirtió en esclavo

Publicado: 2017-07-31

El prestigioso periódico británico The Guardian reunió 10 historias sublevantes sobre la esclavitud moderna y una de ellas está ambientada en el Perú. 

Debido a que se cumplen 200 años de la abolición de la esclavitud en el mundo, The Guardian reunió historias de diversos países del mundo en donde toma cuenta de que la esclavitud no fue erradicada ni se ha acabado, sino que sigue viva a vista y paciencia de los gobernantes. La selección reúne historias de Filipinas, Honduras, Bangladesh, Kenya, Cambodia, Nepal, Corea del Norte, Brasil y Perú.

La periodista mexicana Stephania Corpi se adentró en La Pampa para relatar la historia de Mario, joven cusqueño que llegó a esa zona de Madre de Dios con engaños en los que le ofrecieron un buen trabajo. En el proceso de un año fue explotado, estafado y golpeado por su empleador, quien no le pagó nada del trabajo de casi 24 horas que realizaba. Actualmente él vive asustado porque incluso vio gente morir dentro de las minas debido a la explotación laboral.

La historia que la periodista buscó por semanas en La Pampa fue seleccionada y publicada este sábado 29 de Julio por The Guardian junto a otros 9 testimonios de distintos países del mundo para llamar la atención sobre la existencia de la esclavitud moderna. 

Mario es un sobreviviente de la esclavitud. Fue explotado como obrero minero en La Pampa, Madre de Dios. Para Corpi, lo más difícil de este trabajo fue lograr que una persona esté dispuesta a "aceptar que ha sido víctima de esclavitud", porque es una realidad que todos prefieren olvidar y dejar pasar.

Esta situación de explotación se repite en muchas zonas del país, sobre todo en lugares en donde existe minería informal, lo que también tiene como consecuencia la trata de mujeres, sobre todo en Madre de Dios y Cusco. Situación de grave violencia contra las mujeres que aún no es resuelta por el Estado. La historia de Corpi debería hacer que el Estado tome una mayor atención y procure erradicar la esclavitud moderna que aún vivimos peruanos y peruanas.

La historia de Mario

Mantenido en condiciones de trabajo forzoso en una mina de oro en Perú

Vivía con mi tía en Cusco cuando un amigo de la escuela me presentó al señor Carlos. Había trabajado con él en las minas de oro y dijo que era digno de confianza. Dijo que podía hacer buen dinero rápido y el trabajo no era tan difícil, todo lo que necesitaba para traer era mi certificado de nacimiento. Llegué una bolsa pequeña y me fui. Tenía 16 años.

Fuimos a Puerto Maldonado, luego nos fuimos a La Pampa. Para obtener buena tierra y buen oro, es necesario probar diferentes sitios, así que eso es lo que hicimos. Trabajamos desde las 5 de la mañana hasta la medianoche y comíamos mientras trabajábamos. Mi sueldo fue de 1.500 soles al mes, pero yo era nuevo en el trabajo y no sabía dónde ni cómo mantener mi dinero a salvo, porque los mineros siempre están ebrios y mantener el dinero o el oro es peligroso. Puedes matarte si alguien piensa que los robaste. El señor Carlos se ofreció a mantener mi sueldo para mí, y me daría 100 o 200 soles para comprar ropa o zapatos para el trabajo.

Me quedé un año haciendo diferentes trabajos. Al principio, obtendríamos 20 o 30 gramos por turno, pero luego compraron dos motores y los cambios cambiaron. Comencé a trabajar 24 horas seguidas y estaba cansado y enfermo todo el tiempo, pero no nos dejaron tomar días libres. La gente estaba muriendo dentro de las minas, y sus cuerpos serían llevados y echados fuera. Nadie dijo nada al respecto, y nadie preguntó.

Un día, vi a un buen chico que conocía de la mina que salía con el señor Carlos. Al día siguiente, el tipo estaba muerto. Estaba aterrado. Le pedí al señor Carlos todo mi dinero al final de mi turno, pero él se negó, y me dijo que tampoco me devolvería mis documentos. Luego me golpeó y amenazó con matarme. Me llevó hasta el centro de la selva y me dejó entre la mina y la carretera. Incluso ahora, todos estos años más tarde, estoy aterrorizado de que me encuentre.

Estos días conduzco un mototaxi. No paga muy bien, pero me deja alquilar una habitación para mí. Si pudiera elegir algo, estudiaría para ser veterinario. Me gustan mucho los animales, son más amables que los humanos.


Escrito por

El Estado de la Trata

Investigaciones sobre trata de personas en el Perú


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